Mindfulness para músicos

¿Esta práctica sirve para hacer música?

De unos años a la fecha se ha popularizado la práctica del mindfulness. Aunque mucha gente piensa que es lo mismo que la meditación, no es así.

Empecemos por entender qué es y para qué sirve.

Mindfulness es la capacidad de prestar atención de manera consciente a la experiencia del momento presente con interés, curiosidad y aceptación.

La meditación es más profunda, porque requiere tomar consciencia de “la nada”, mientras que el mindfulness se centra en prestar atención al presente. Por eso puede practicarse en cualquier momento y lugar, solo o acompañado, cuando no haces nada o a mitad del trabajo.

Es, en pocas palabras, una herramienta para mejorar la concentración y evitar la fatiga laboral.

De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social, 75% de los mexicanos padecen fatiga laboral. Y no creas que porque eres músico te libras de padecer este síndrome. Muchos días de trabajo al año, cero vacaciones, grabaciones, presentaciones, viajes, todo suma. Por eso te presentamos este artículo sobre mindfulness, puede servirte para esto y para estar más alerta y creativo cuando tienes que estarlo, para eliminar la ansiedad, para generar pensamientos positivos, para ver más claramente y para crear sin tantos distractores. Es decir, no es una práctica para hacer mejor música, simplemente harás música más concentrado.

¿Cómo practicar mindfulness para músicos?

Es muy sencillo. En realidad no tienes que hacer algo específicamente para músicos. YouTube está lleno de videos que van de los 7 minutos a una hora o más. Todos sirven, pero si estás pensando en algo específico, te proponemos el siguiente:

Te invitamos a practicarlo todos los días. No pongas pretextos como que no tienes tiempo. En algún momento del día que estés tentado a tomar tu teléfono móvil para descansar un poco, cambia el WhatsApp o el Candy Crush por un ejercicio de mindfulness. En poco tiempo comenzarás a ver los resultados, aunque no esperes que eso suceda en 2 o 3 días. Inténtalo al menos un mes, como si empezaras una rutina de ejercicio. Cuando te des cuenta, ya estarás enganchado porque te vas a sentir mejor.

Ahora bien, si aun así crees que no tienes tiempo, te proponemos

4 ejercicios sencillos y rápidos de mindfulness

1. Cuando te sientas cansado, levántate, sal a la calle, a un patio, a un jardín y haz algunos estiramientos. Siente cómo se mueven tus músculos y cómo te sientes al estirarte.
2. Platica con alguien y escúchalo con atención. Cuando comience a hablar respira profundamente y no lo interrumpas ni des tu opinión, solo escucha.
3. Dibuja. Puedes hacer solo garabatos, no necesitas ser un dibujante experto. Solo elige una idea y empieza a deslizar el lápiz o la pluma sobre un papel. Haz esto después de una hora de trabajo.
4. En cualquier momento deja tu trabajo o lo que estés haciendo a un lado y analiza cómo se encuentran tu mente y tu cuerpo. ¿Estás contracturado, tienes hambre o te pesan los pies? Bueno, así conectarás contigo. Hazlo varias veces al día.

Por cierto, practicar mindfulness no requiere ningún tipo de creencia religiosa, como suele suceder con la meditación.

APRENDE EL VALOR DE LA PRESENCIA PLENA.