La industria musical ha sufrido transformaciones vertiginosas desde los años 80 del siglo pasado, y no van a parar. La tecnología obliga a todos sus miembros a mantenerse constantemente no solo al día, sino preparados para la siguiente transformación.

Es obvio que este ritmo ha sometido a los artistas a constantes reevaluaciones de su trabajo, de su carrera y de su relevancia a largo plazo. Así como gracias a las redes sociales existen más posibilidades de éxito inmediato que nunca, sostenerse con el paso del tiempo se ha convertido en un reto muy complicado.

Porque no solo se trata de tener canciones que conecten con el público. Hoy se necesita un equipo de colaboradores que ayuden a desarrollar contenido, que den coherencia a la imagen, que lleven el control de la música que se sube a plataformas sociales y supervisen las ganancias, que manejen la mercancía, las relaciones públicas… Y que todo eso dé buenos resultados.

En ese contexto, vale la pena preguntarse qué significa hoy el éxito para un cantante, un cantautor, un grupo, una banda. ¿Volver viral una canción? ¿Darle al público lo que quiere? ¿Tener una base de fans muy leal? ¿Montar espectáculos sofisticados? ¿Destacar dentro de un género? ¿Entrar en listas de reproducción? ¿Conservar la integridad sobre las decisiones que se toman? ¿Mantener la vigencia con el paso de los años?

Por supuesto, cada quien podrá tener su propia opinión, pero hacerse esa pregunta adquiere un significado particularmente relevante en este momento.

Es por eso que las empresas MIDia Research y Amuse realizaron una investigación que pretendía entender qué es lo más importante para los músicos cuando piensan en sus carreras hoy.

Los resultados aparecen en el reporte “Sustainability from chaos. How today’s artists find sustainable success in a turbulent music industry”.

Los principales puntos que arrojó este estudio son:

• Los creadores de música de hoy aseguran que la conexión con su público y tocarlos con la música es su principal definición de éxito, independientemente del tamaño de la audiencia.
• Priorizan la integridad artística, la satisfacción creativa y la sustentabilidad a largo plazo mientras navegan por el paisaje siempre cambiante de la industria musical.
• Muchos de los factores y métricas que sustentan el éxito están relacionados con los intereses creados por la maquinaria de la industria musical y rara vez con los objetivos del artista.
• Con tantas canciones lanzadas y subidas a plataformas de streaming, destacarse entre el ruido es el principal desafío para los artistas, seguido por no tener suficiente tiempo para crear.
• Aunque los artistas aspiran a la independencia, no pueden sostener una carrera sin ayuda y socios. Más artistas que nunca buscan hacer una carrera creando música; sin embargo, menos del 5% están firmados con sellos discográficos: el 1% con las principales discográficas y el resto con independientes. Un impresionante 95% de los artistas son lo que llamamos ‘artista directo’, es decir, artistas que lanzan música de forma independiente a través de un distribuidor/plataforma de servicios para artistas

(aproximadamente el 2% de ellos habían salido previamente del sistema de sellos).

• Cuando se les preguntó acerca de sus socios ideales para crear y lanzar música, los artistas mostraron una preferencia por trabajar con distribuidores, plataformas de autoservicio y sellos independientes.
• Las discográficas y las compañías de servicios para artistas deberían adoptar una visión a largo plazo sobre las relaciones con los artistas, centrándose en las aspiraciones únicas y multifacéticas de éxito que los propios artistas tienen, para satisfacer sus necesidades en un entorno cada vez más complejo y exigente.

«Los artistas son ambiciosos. Se adentran en un mundo ultra competitivo y lleno de riesgos e incertidumbre, colocándose en el ojo del huracán. Lo que los artistas realmente buscan, como saben muchos gerentes, ejecutivos y colaboradores, es un avance continuo que encapsule la progresión creativa, el respeto de sus colaboradores y el crecimiento de su base de fanáticos”, concluye el estudio.

Sin duda estos son temas sobre los que toda la industria debería reflexionar, considerando que los artistas (junto con los compositores) son la base que sostiene a la industria de la música.