En marzo pasado, Gloria Estefan anunció el próximo estreno de Raíces, un disco que, como su nombre lo dice, es un reencuentro con la música latina de siempre, esa que se ha vuelto un emblema clásico de nuestra cultura.
El primer adelanto de ese álbum es la canción homónima, una composición de su esposo Emilio Estefan, la cual ha venido escalando las listas de monitorLATINO en USA y que hoy corona el Top 20.
La semana pasada, “Raíces” ocupaba la séptima posición, desde donde dio el salto a la primera, dejando en el segundo sitio a “Mi Primer Día sin Ti”, de Carin Leon, y en el tercero a “Desde Hoy”, de Natti Natasha.
Esto se debe a que fue programada 2,323 en la radio latina de Estados Unidos, dejando una huella de 18.81 millones de impresiones, una cifra muy superior a las que suelen registrar los #1 en el país del Norte.
Varias son las razones de este #1. En primer lugar, se trata del regreso de Gloria luego de 18 años sin publicar música en español. En segundo lugar, la intérprete ha sido una figura destacada desde su debut junto a su esposo. En tercer lugar, destacan unos arreglos muy sofisticados y cuidadosos y una instrumentación impecable. En cuarto lugar, ella misma ha dicho que “este álbum es una carta de amor a mi comunidad y a mis orígenes, musical, cultural y espiritualmente”.
La canción nos recuerda la importancia de expresarle a nuestro seres queridos ese amor que sentimos por ellos, de sembrar cosas buenas y de disfrutar la vida. Por lo que respecta a la parte musical, la instrumentación evoca la riqueza sonora de la música latina tradicional. Se percibe una base rítmica con elementos de la balada latina clásica, enriquecida con instrumentación que resalta la calidez y la emoción. La presencia de percusión latina, sutil pero marcada, añade una cadencia rítmica característica de lo latino, un sonido que apreciamos y compartimos todos los que vivimos en este continente.
Este regreso triunfal subraya la importancia de honrar nuestra herencia cultural y de transmitir mensajes universales de amor, legado y disfrute vital. Todo ello es sencillo, si viene envuelto en la voz de Gloria Estefan.
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